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Marcos Vinicius Lourenço Berardinelli

Refinación de metales: algunos cuidados necesarios

mano con guante sosteniendo vidrio de laboratorio de química

Como todo experimento químico, la refinación de metales debe realizarse siguiendo algunas reglas de seguridad para evitar accidentes o problemas de salud más graves, principalmente porque en este procedimiento se utilizan muchos reactivos tóxicos y peligrosos, tanto para los seres humanos como para el medio ambiente.


Los cuidados comienzan con la elección del lugar para la realización del proceso, que debe ser específico solo para la refinación, sin circulación de personas o animales. En relación con la manipulación de los reactivos, siempre se recomienda, en cualquier laboratorio de química del mundo, el uso de batas de manga larga, pantalones, zapatos cerrados, gafas de seguridad y guantes resistentes a los productos que se van a manejar. También es preferible utilizar cristalería propia para laboratorio. Recordando que, al manipular ácidos, siempre se recomienda añadir el ácido al agua en lugar de al contrario, evitando la proyección del ácido fuera del recipiente y previniendo posibles accidentes.


Pasando al proceso de refinación en sí, es de suma importancia realizar la corrosión de los metales en un equipo llamado campana de extracción. La campana tiene la función de eliminar los gases tóxicos producidos en las reacciones químicas, protegiendo así a la persona que está realizando el procedimiento. La campana también es importante en caso de derrames de reactivos durante los procesos. Debido al contacto directo con los reactivos, la campana debe estar hecha de material resistente a los ácidos utilizados en la corrosión de los metales.


Además de la campana, es necesaria la presencia de una ducha de emergencia y un lavaojos en caso de contacto con algún reactivo, para mitigar los posibles daños causados por el mismo. Tampoco se debe comer ni beber nada en el lugar donde se realiza la refinación, evitando la contaminación por algún reactivo.


El almacenamiento de todos los reactivos también debe realizarse con mucha cautela, siempre identificando todos los compartimentos utilizados y siguiendo las normas y precauciones presentes en la FDS (Ficha de Datos de Seguridad) de los reactivos. Cada reactivo tiene su propia FDS, por lo que se recomienda la lectura de la ficha de cada uno de los productos utilizados para entender mejor con qué tipo de sustancias se está manipulando.


Por último, la correcta eliminación de los productos también es de suma importancia. Además de los reactivos utilizados, muchas aleaciones metálicas contienen metales pesados en su composición, como plomo, cromo, cobre y níquel, por lo que cuando se disuelven, estos metales pesados están presentes en la solución. De esta manera, tanto los reactivos como los residuos de la refinación, si no se eliminan correctamente, pueden causar grandes daños ambientales, por lo que es necesario realizar el tratamiento y la eliminación correcta de cada producto utilizado y producido.


Inicio del ajuste de pH para la precipitación de los metales base. En la situación mostrada en la foto, el objetivo es un pH de 10 para precipitar el zinc como hidróxido.
Figura 1. Inicio del ajuste de pH para la precipitación de los metales base. En la situación mostrada en la foto, el objetivo es un pH de 10 para precipitar el zinc como hidróxido.

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